Intercambiemos poesías: filosofía y poética en la primera infancia

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A partir de las reflexiones logradas en el seminario Desarrollo del pensamiento, la cognición y los talentos infantiles; la educación y los medios de la Maestría de Infancia y Cultura de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, surge la reflexión de que los niños y las niñas de primera infancia sostienen una relación muy especial con el asombro y la perplejidad hacia el mundo social, natural y cultural en el que se encuentran inmersos. Acciones que son la cuna del pensamiento filosófico, al interrogar el ser y sus formas de conocer, crear e interpretar el mundo, pero también origen de la poética al ser el lazo con lo sensible, lo estético y lo efímero.

Lo que invita a pensar que las formas en las que los niños y niñas de primera infancia expresan a través del lenguaje su pensamiento no solo es un retrato de la manera en que establecen un dominio de la cultura y retratan el mundo social, sino que pueden ser comprendidas como interrogantes filosóficos y creación literaria, que tienen un sentido performativo de la realidad en la que viven y de las formas en que interactúan con los otros.

Gareth Matthews dirá en la Filosofía y el niño (1980) que los niños y las niñas son filósofos pero al crecer los adultos les enseñamos a olvidarlo a través de la invalidación de la pregunta y al opacar la perplejidad. Aquí nos atrevemos a decir además, que los niños y las niñas son poetas pero como adultos contribuimos a que olviden a la poesía como forma del valida del pensamiento y el lenguaje, al deslucir lo bello y sensible que habita sus enunciaciones.

El siguiente ejercicio creativo, está en la pregunta ¿y qué sucedería si contesto poesía con poesía?, retomando frases que a lo largo de mi experiencia docente he escuchado de niños y niñas con quienes tuve la fortuna de interactuar y algunas que fueron compartidas por otra maestra (niños y niñas cuyos nombres se ha llevado el tiempo pero de quienes perdura en la memoria la creación discursiva). A estas frases de los niños y niñas les respondo desde un ejercicio sensible basado en la palabra, como si intercambiáramos en el tiempo poesías, si aquello que dijeron fuera sostenido bajo la luz de la creación poética.

 ¿Y qué sucedería si contesto poesía con poesía?